A veces no hay remedio para todo, pero la esperanza hace que tarde o temprano en un rinconcito aparezca una linterna que nos alumbre ,y nos devuelve una sonrisa pérdida. El nerviosismo, la ansiedad y la impulsividad nos son buenas compañeras. Necesitamos ser felices, ser nosotras, ser únicas. La espera no es buen amigo, pero le acompañamos. A veces nos lo merecemos pero la vida es corta para que no haya remedio para las desilusiones. El carrusel de la vida continúa, es el único que no para, se va junto aquel tren que no quiso realizar más una parada. Vivir, gozar,ser únicas. No hay que esperar a chocarnos contra un stop, para detenernos a pensar. Basta de interrogar, comprender que fue el ayer.Vivamos el presente fecundo, plagado de retoños que en primavera florecerán dándonos algo tan inmenso que no se puede ni llegar a imaginar.
1.7.09
Con la luz apagada
Pensar o sentir? Prefiero olvidar que prometí más de una y mil cosas. Me obsesionaste, me arrastraste junto a ti. Como pude ser tan ingenua, tengo mucho que aprender pero tú también. Sabes que te aprovechaste de la luz tenue que desprende la madrugada. Pero lo conseguiste embriagando mi cuerpo y mi ser.No sabia lo que me pasaba, sólo podía pensar en ti. Tus miradas me penetraban con las luces apagadas ,y vivían dentro de mi por semanas, meses,años. Me hacías sentirme yo mismo, más seguro, completo. E incluso me recordabas que se puede soñar, volar entre las nubes,como aquel sueño que tuve de niño y nunca podré realizar sino estoy contigo.
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